Galván Street

“Catequista camina, trabaja con la familia para transformar la sociedad” 

    Con este lema se desarrolló el encuentro de catequistas de la Arquidiócesis de Santo Domingo en el Colegio Quisqueya con motivo a la celebración del Día del Catequista, donde se contó con la participación de las diversas zonas pastorales de la Arquidiócesis. Se inició con la animación a las nueve de la mañana. Esta animación comprendía cantos, bailes, aplausos… todo con el objetivo de dar un toque festivo y alegre a la actividad. 

   Luego de varios minutos de algarabía, su eminencia reverendísima Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez dirigió las palabras de inicio a todos los catequistas presentes, exhortándoles a vivir y transmitir la fe siendo este un momento propicio para nuestra Iglesia con motivo al Año de la Fe, quien luego junto a un grupo de sacerdotes pasó a confesar a los fieles; mostrando en sus breves palabras la gran afabilidad que profesa a los catequistas. Después se llevaron a cabo varias intervenciones, alternadas con la inagotable y contagiosa participación del grupo animador. Entre éstas, la bienvenida fraterna de la directora del centro, Sor Josefina Payano. Luego continuó la muy ferviente motivación de Monseñor José Dolores Gruñón Estrella (Obispo de la Diócesis de San Juan) que invitaba a todos los catequistas a “salir de Egipto e ir a Nazaret”, metáfora que utilizó para referirse a Egipto como el espacio o estado de vida donde se posee grandes provisiones de pan (alimento), comodidades, y lugar donde “la persona busca salvarse” olvidándose de los demás … pero que está marcado por la esclavitud, esto es recordando el largo tiempo que el pueblo de Israel duró en dicho país; y a Nazaret como espacio sencillo, muchas veces sin pan, pero con “gran riqueza espiritual” y dotado de libertad. Al mismo tiempo animó a que aumentemos nuestra fe: “entre más grande es nuestra fe, más pequeños serán los problemas”. Para finalizar, recordó el interés de la evangelización en la familia, pues ella con su carácter forjador de comunidades cristianas podrá cambiar la sociedad.

     Este encuentro de Catequistas es un signo más de que vale la pena mantener viva nuestra fe en Dios, quien permanece fiel y escucha nuestro clamor a pesar de las tinieblas que nos arropan; de continuar amando nuestra Iglesia Católica, pues ya que posee una amplia gama de valores necesarios para el hombre actual, y de que “Otro mundo es posible” si tenemos a Cristo en nuestras vidas y en nuestra familia.

por Hairol Mateo